viernes, 30 de julio de 2010

Hace unos meses hice una pelota, un poco transparente y de tamaño mediano. La llené de sensaciones y sentimientos, de alegría, de lágrimas, de tristeza, de enojos, de risas, de buenos recuerdos y de malos recuerdos. Toda esta variedad de sentimientos y recuerdos están dentro de esta pelota. Fui agregando poco a poco dichos sentimientos y al pasar el tiempo iban siendo más y más. En su momento, era muy agradable llevar la pelota conmigo. Ahora ya no encuentro la forma de desprenderme de ella, por más que quiera, es como si en cierta forma estuviese atada a mí. Esta pelota que al principio empezó siendo de tamaño mediano, se volvió para mí, una gran pelota. Me cuesta llevarla y arrastrarla, me alenta el paso y me agota. Maldita pelota, todavía estoy buscando la forma de deshacerla de alguna manera.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Porque así lo disfruto más .                      

Porque así lo disfruto más .